Noviembre de 2024
Enrique Cabezón reflexiona en su nuevo libro sobre la ciudad, el territorio y sus servidumbres clientelares
Historia universal de ninguna parte. Olvido, territorio y mapa de una periferia histórica ve la luz en el sello riojano La cabaña del Loco, que ya publicó otro libro de Cabezón, Sílabas trabadas, en 2019
Acerca del libro
Enrique Cabezón (Logroño, 1976). Ilustrador, escritor, editor, diseñador gráfico, poeta y activista: dinamitador cultural, según sus propias palabras. Es autor de los poemarios Territorio de ceniza (2003), El lenguaje de las serpientes (2005; junto al poeta José Luis Pérez Pastor), Dios cabalga los lomos de las muchachas (2005), No busques lágrimas en el ojo del muerto (2006), Existir en los días (2009), Besar el paisaje (2013), Desdecir (2013) y 28.48 minutos de lectura (Premio del Libro ‘Ateneo Riojano’ 2023). Además del e-libro La traición en los colores (2001), las plaquettes Circunvalación (2021) y Canto tartamudo (2024), Parte de su obra poética dispersa está recogida en Los dedos azules de la noche (2022). En prosa ha publicado el dietario Sílabas trabadas (2019) y la novela Una semilla (2021). Forma parte del proyecto Ediciones del 4 de agosto y es coordinador del festival ‘Agosto clandestino. Poetas en La Rioja’ desde hace veinte años. Como ilustrador e historietista caben destacar Prometeo (1996), Agua del Nilo (con guion de Piedad Valverde, 1999), Cementerio de las horas (2004), Tras el ratón (2004), El guitón Onofre (adaptación de la novela de Gregorio González, con guion de Luis Alberto Cabezón García, 2005), El contorno (2014) o el colectivo Plagio de encantes de Jesús Cuadrado (2001), también de numerosas ilustraciones para periódicos, libros y discos musicales. Además, ha grabado tres discos con su banda de rock enBlanco.
La crítica ha dicho:
Uno de los más destacados poetas de La Rioja
Joaquín Carbonell
La
lectura es siempre un punto de encuentro. En el caso de Enrique, como
ya le he leído más veces, el punto de encuentro se redimensiona hasta
convertirse en una especie de albergue familiar al que gusta volver
porque la fiesta está asegurada.
José Blanco