Director, guionista: Sigfrid Monleón
País: España
Duración: 80 min.
Fotografía: César Hernando
Montador: Buster Franco
Música: Sergio de la Puente
Productor: Antonio Hens
Cántico es una indagación en la historia y la poesía de Pablo García Baena (Córdoba, 1921), el máximo exponente del grupo poético cordobés formado alrededor de la revista del mismo nombre. Comienza a modo de diario de rodaje, mostrando las dificultades del proyecto, porque el poeta, a sus 94 años, considera que esta película llega tarde, cuando ya han fallecido todos sus compañeros. Pero una vez nos abra las puertas de su casa, sus fotografías, objetos y libros, sus recuerdos y reflexiones, dan paso, más allá de sus vivencias, a un viaje sensorial por las claves estéticas de su poesía y su experiencia del lenguaje. (Aula de Cne. Junta de Andalucía)
Cántico fue una revista de poesía editada por un grupo de poetas e ilustradores cordobeses entre los años 40 y 50 del pasado siglo. Su repercusión en el conjunto de la Literatura Española fue definitiva porque la poesía escrita para ser publicada en esa revista supuso la continuidad de una tradición poética culta, donde primaba el uso del lenguaje, la sublimación de los sentimientos, la búsqueda de la palabra rica y justa, en definitiva, un estilo que estaba abocado a desaparecer tras los estragos de una guerra civil y el exilio de una buena parte de la intelectualidad. La importancia capital del que luego se denominó Grupo Cántico es tal que se considera uno de las expresiones poéticas fundamentales de la literatura española del siglo XX, heredera de Bécquer, Juan Ramón Jiménez, Federico García Lorca o Luis Cernuda y precursora del llamado grupo de los Novísimos. Es por ello que, antes que nada, el documental Cántico que aquí presentamos favorece el desarrollo de competencias culturales y artísticas y su difusión ayuda a conocer, comprender, apreciar y valorar críticamente la poesía, la literatura en general, pero también las costumbres y la Historia, todo lo cual sirve de fuente de enriquecimiento y disfrute. Pero Cántico es también un “experimento” audiovisual: tentados por el siempre difícil reto de llevar la literatura a la gran pantalla, de la mano del director Sigfrid Monleón se procede a un viaje por toda la literatura de los poetas del grupo, especialmente por la del único que permanece vivo, Pablo García Baena. Así Sigfrid Monleón ofrece al espectador la poesía de Cántico en estado puro y la confronta a las biografías de las personas que la escribieron, al ambiente social cordobés de la época en que fue escrita en un entorno urbano con más de mil años de historia, a las tradiciones religiosas andaluzas y su vívida iconografía, al desarrollo de la guerra civil, a la literatura y el arte como refugio para muchos de las miserias de la posguerra, a la vida de los homosexuales en las ciudades de provincia, para concluir que una es resultado de la otra o que, en boca de Pablo García Baena, no tenemos un lenguaje para la mística y otro para el erotismo. El lenguaje de la religión es el del amor y es el mismo para la carne y para Dios.
Pablo García Baena (Córdoba, 29 de junio de 1923) Estudió Bellas Artes. En 1947 fundó, junto a Ricardo Molina, Juan Bernier y Julio Aumente, la revista Cántico, punto de encuentro de un grupo de escritores andaluces que reivindicaba una mayor exigencia estética y enlazaba con la poesía del 27. Su obra, antes casi olvidada, fue rescatada por un grupo de poetas de la promoción del 70. Se destacan los títulos Rumor oculto, 1946, Mientras cantan los pájaros, 1948, Antiguo muchacho, 1950, Junio, 1957, Prehistoria, 1994, Poniente, 1995, En la quietud del tiempo en 2002 y Los Campos Elíseos en 2006. En prosa, ha escrito, entre otras, Lectivo, 1983, El retablo de las cofradías, 1985 y Zahorí Picasso, 1999. De los galardones recibidos deben mencionarse el premio Príncipe de Asturias en 1984, Medallas de Oro de la Ciudad de Córdoba en 1984 y de la Provincia de Málaga en 2004, Hijo Predilecto de Andalucía en 1988, Premio Andalucía de las Letras en 1992 y la XVII edición del Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2008. (A media voz)
Ricardo Molina (Puente Genil, Córdoba, 28 de diciembre de 1917-Córdoba, 23 de enero de 1968) Después de licenciarse en Filosofía y Letras dedicó mucha parte de su tiempo al cultivo de las letras, fundando y dirigiendo la Revista Cántico en compañía de Juan Bernier y Pablo García Baena. Fue además crítico literario, prosista y autor de varios ensayos sobre cante flamenco. Entre sus obras, se destacan: El río de los ángeles, Elegías de Sandua, Elegía de Medina Azahara, Psalmos y Dulcinea. Obtuvo el premio Adonais en 1949. (A media voz)
Julio Aumente (Córdoba, España, 29 de octubre de 1921-íd., 29 de julio de 2006) Era nieto del compositor musical Cipriano Martínez-Rücker. Ejerció de abogado en Córdoba, trasladándose a Madrid en 1965, donde también trabajó como perito tasador de arte y antigüedades así como experto en genealogía y heráldica. Fue co-fundador del Grupo Cántico. Julio Aumente fue conocido, sobre todo, por su poesía. Junto a Pablo García Baena, Ricardo Molina, Juan Bernier y Mario López, fue el más joven de los fundadores y colaboradores asiduos de la revista cordobesa Cántico, que comenzó en 1947 y concluyó 10 años después llegando a ser una de las publicaciones más brillantes de la posguerra y la primera que dedicó un número homenaje al exiliado Luis Cernuda. Aumente fue el poeta más independiente del grupo, el más remiso y el último en publicar. Publicó su primer libro, El aire que no vuelve en 1955, en la entonces prestigiosa colección Adonais. En ella editó también su segundo poemario, Los silencios en 1958. Tras varios años de silencio y alejamiento retornó en 1983, con el que muchos juzgan su mejor libro, La antesala, que resultó finalista del premio Nacional de la Crítica. (poetasandaluces.com)
Juan Bernier (La Carlota, 1911-Córdoba, 1989) Fue poeta y arqueólogo. Como poeta fue uno de los fundadores de la revista Cántico, como arqueólogo destacó su labor para localizar los yacimientos de la provincia de Córdoba, que más tarde publicaría en distintas obras. Su apellido Bernier desciende de una de las familias de colonos alsacianos que en el siglo XVIII vino a poblar la villa recién fundada por el monarca Carlos III. Cursó la carreras de Derecho en Sevilla y Granada y en Córdoba la de Magisterio, pero será esta última la que profesó hasta su jubilación. Persona de extraordinaria cultura y lector impenitente. Hay en su obra e incluso en sus vivencias un trasfondo filosófico, aprehendido en la lectura de los autores clásicos. Coincide con Schopenhauer en la concepción de la muerte como violenta destrucción de nuestro ser. La muerte será uno de los temas característicos de su obra: Morir, Siembra de tumbas, Pero él llamaba a la muerte, Cementerio, Resurrección y su trilogía Los Muertos. Durante la Guerra Civil escribió versos clandestinos denunciando las tempranas matanzas de las tropas golpistas en Marruecos, como consta en sus diarios personales. En el otoño de 1936 sería movilizado por la fuerza. En 1947 funda, junto con Ricardo Molina y Pablo García Baena, la revista de poesía Cántico, grupo con el que compartía la idea de otorgar la primacía a la estética antes que al mensaje. La poesía de Bernier, más intensa que extensa, se caracteriza por la riqueza expresiva y sensorial, y por una pasión desbordante por la Naturaleza. (poetasandaluces)
Mario López (Bujalance, Córdoba, 1 de agosto de 1918-1 de abril de 2003) Fue uno de los fundadores de la revista Cántico y socio fundador del Ateneo de Córdoba, ciudad de la que fue miembro de su Real Academia. En su pueblo natal fundó los Cuadernos de Arte, Historia y Literatura, organizó sus Juegos Florales de Primavera y dió nombre al Premio Nacional de Poesía Mario López. Fue Premio Internacional de Poesía del Círculo de Escritores Iberoamericanos de Nueva York el año 1963, Premio Andaluz de las Letras en 1997, y fue nombrado Hijo Predilecto de Bujalance en 1985, donde se le puso su nombre a su calle natal. Su obra poética está contenida en: Poemas publicados en Cántico (1947-1948), Garganta y Corazón del Sur (1951), Universo de pueblo (1960), Siete canciones (1968), Cal muerta, cielo vivo (1969), Del campo y soledades (1978), Nostalgiario andaluz (1979), Museo simbólico (1982), Campo de Córdoba (1990), Oda esencial a España (1991), Versos a María del Valle (1992), Tiempo detenido (1996) y Poesía. Antología (1997). Por la Peña Flamenca La Pajarona de Bujalance, se editó un libro Homenaje a Mario López (1997). (Desde mi torre cobalto)